El presidente peruano, Martín Vizcarra, dijo que acudirá al Congreso a responder las acusaciones de corrupción en un nuevo juicio político que busca su destitución, y acusó que se estaba «jugando» con la democracia a cinco meses de unas elecciones generales.
El Congreso decidió el lunes abrir un nuevo proceso para destituir a Vizcarra por segunda vez en menos de dos meses, tras conocerse acusaciones de corrupción de cuando fue gobernador hace siete años, y lo citó para que presente sus descargos el lunes 9 de noviembre ante el pleno del legislativo.
Para expulsar a Vizcarra, que asumió el poder en 2018 tras la renuncia de Pedro Pablo Kuczynski por un caso de corrupción, el Congreso debe reunir 87 votos de los 130 del legislativo. El 18 de septiembre, en el primer intento para echar a Vizcarra, de 57 años, la vacancia fue apoyada sólo por 32 votos.
«Como demócrata, acepto las herramientas establecidas en nuestra Carta Magna, aunque a mi juicio están mal aplicadas y tendré que ir al Congreso para explicar y justificar la carencia de argumentos de esta vacancia», dijo Vizcarra a periodistas durante una inspección de obras en el norte del país.
En la votación el lunes, tres partidos políticos que aglutinan 39 votos rechazaron el nuevo proceso de vacancia a Vizcarra, mientras que otros votaron dispersos, y varios representantes dijeron que esperan escuchar la defensa del mandatario y que no necesariamente votarían por la destitución.
Es poco probable de que se destituya a Vizcarra, cuya gestión es aprobada por un 54% de peruanos, según un sondeo de la firma Ipsos Perú realizada en octubre. Asimismo, un 78% dice que el presidente no debe ser destituido por el Congreso, aunque sí que debe responder ante la justicia al final de su mandato.
Vizcarra pidió al Congreso adelantar su presentación al jueves o viernes para «acabar de una vez por todas con la incertidumbre que tanto daño hace al país, porque la confrontación y las peleas no dejan trabajar al país«.
La nueva turbulencia política en Perú ocurre cuando los casos de coronavirus superan los 906.500 y los muertos 34.500. Además, la cuarentena por la pandemia afectó duramente a la economía local, que caerá este año un 12,7%, según proyecciones.
«Sería sumamente irresponsable que a cinco meses de las elecciones estemos al filo de navaja, jugando con la democracia. Eso es inadmisible y no debemos permitirlo», dijo el mandatario.
Más temprano, el primer ministro Walter Martos indicó que el Gobierno evaluará un recurso legal en busca de frenar el juicio político, y que se reunirá con algunos partidos que tienen «espíritu democrático» en el Congreso para evitar llegar a una situación de «vacancia» de Vizcarra, cuyo mandato culminará a fines de julio del 2021.
«La señal que estamos enviando a nivel internacional es que tenemos un Congreso que ha tomado como deporte la vacancia presidencial», dijo Martos a periodistas antes de viajar al interior del país. «Están creando una crisis política innecesaria que esta retrasando toda la lucha contra la pandemia y la reactivación económica», agregó el primer ministro.
