El gobernador de Florida, el republicano Ron DeSantis, continúa haciendo frente al régimen «woke», preservando el derecho de los padres a educar a sus hijos y defendiendo el deporte femenino frente a las injerencias «trans».
Su medida legislativa estrella para que no se adoctrine a los niños con cuestiones de género es la Ley de Derechos de los Padres en la Educación, tildada por los medios globalistas y activistas de izquierda como el proyecto de ley «No digas gay» (Don’t Say Gay) y apoyada de forma mayoritaria por los estadounidenses. Así, más de un 60 por ciento la respalda y solo el 26 por ciento se opone, según una reciente encuesta.
Esta norma, que garantiza que los padres puedan enviar a sus hijos a la escuela sin temor a que sean adoctrinados, impone que el contenido de las clases sea «apropiado a la edad o al desarrollo de los estudiantes de acuerdo con los estándares estatales«.
Y obliga a las escuelas a hacer público cualquier formulario de evaluación de salud que plantee entregar a los estudiantes (desde infantil hasta tercero de Primaria), y a solicitar el permiso de los padres antes de que los niños respondan. En caso de que no se cumplan estos requisitos, los padres podrán presentar quejas oficiales ante el departamento de Educación y contra el distrito escolar, y recibir una indemnización por daños.
Retiro del régimen fiscal de Disney
Mientras DeSantis se mantiene firme en sus convicciones, Disney, que cuenta con una influencia sin igual en Florida y hoy defiende posiciones de la izquierda «woke» en casi todos sus productos, ha lanzado una campaña de acoso contra él asegurando que la nueva legislación «puede usarse para discriminar injustamente a los niños LGTBI».
Pero el gobernador dejó claro que el estado no va a basar nunca sus decisiones en «las elucubraciones de las corporaciones ‘woke‘», recordó los lazos de Disney con el régimen comunista chino e insistió en que no cederá. «La posibilidad de que dé marcha atrás en mi compromiso con los alumnos, en mi compromiso con los derechos de los padres (…), es cero», dijo.
Este miércoles, el Senado del estado aprobó (por 23 votos a favor y 16 en contra) retirar el régimen fiscal especial con el que desde hace décadas Disney controla unas 25.000 acres (más de 10.100 hectáreas) en el condado de Orlando, donde se encuentran el parque temático y las instalaciones de la compañía. La decisión será ratificada en la Cámara de Representantes, donde los republicanos tienen una amplia mayoría.
Eliminación de los libros ‘woke’ en el programa escolar
El Gobierno de DeSantis también ha rechazado el 41 por ciento de los libros (54 de 132) presentados para formar parte del plan de estudio del próximo año escolar. La razón es que no cumplen con los estándares Benchmarks for Excellent Student Thinking (BEST) al incluir referencias «woke» como la Teoría Crítica de la raza o el aprendizaje socioemocional en la asignatura de Matemáticas.
«En Florida educaremos a nuestros hijos, no los adoctrinaremos«, aseguró el gobernador en la presentación de la lista de libros que sí cumplen con los parámetros educativos de un estado que ha dejado claro que no permitirá que los impuestos se gasten en enseñar a los niños a odiar a EEUU o «a odiarse unos a otros».
Defensa del deporte femenino frente a los ‘infiltrados trans’
En junio del año pasado, DeSantis aprobó la Ley de Equidad en los Deportes Femeninos por la que «un equipo de atletismo o de cualquier deporte diseñado para mujeres o niñas no puede aceptar a integrantes masculinos (según el sexo biológico)».
En la proclamación, recordó que «las mujeres llevan décadas luchando por la igualdad de oportunidades en el deporte» y declaró que era «injusto dejar que la ideología erosione estas oportunidades como sucede en otros estados».
En marzo, proclamó a Emma Weyant como ganadora de la carrera de natación femenina del campeonato universitario nacional (NCAA) y en el que de forma holgada «ganó» Lia Thomas, un hombre que dice ser una mujer.
«Al permitir que los hombres compitan en deportes femeninos, la NCAA está destruyendo oportunidades para las mujeres, burlándose de sus campeonatos y perpetuando un fraude», manifestó a través de Twitter. «En Florida, rechazamos estas mentiras y reconocemos a Emma Weyant como la mejor nadadora femenina en los 500 yardas estilo libre», agregó.