Podemos, PSOE, Compromís o EH Bildu, que se han mostrado favorables a tramitar la derogación de la prisión permanente revisable, no han arropado a los padres de Diana Quer en el último adiós a su hija. Pero, de haberlo hecho, ¿se habrían atrevido a mirarlos a la cara?
La autopsia de Diana Quer no ha podido aún determinar si sufrió abusos sexuales -para ello serán necesarias pruebas específicas de laboratorio-, pero sí ha revelado que murió estrangulada, y no atropellada como sostenía José Enrique Abuin Gey, el autor confeso del asesinato.
La joven de 18 años desapareció el 22 de agosto de 2016. Su cuerpo fue hallado sin vida 496 días después, el pasado 31 de diciembre, en un pozo de agua y lastrado con contrapesos para mantenerlo hundido.
El asesino de Diana, conocido como ‘El Chicle’, estuvo implicado con anterioridad en numerosos delitos por tráfico de drogas y agresión sexual, pero gracias a Podemos, PSOE, Ciudadanos, Compromís o EH Bildu se librará de ser condenado a prisión permanente revisable.
El 10 de octubre de 2017, los grupos se mostraron favorables a tramitar en el Congreso de los Diputados la derogación de esta figura incluida en el Código Penal hace apenas dos años y medio. Casi todo el arco parlamentario, a excepción del PP y el diputado de Unión del Pueblo Navarro (UPN), apoyó una proposición de ley del PNV para que esta pena desaparezca del ordenamiento jurídico. Ciudadanos no se mojó -una vez más- y decidió abstenerse.
Juan José Cortés, Antonio del Castillo, Ruth Ortiz y Rocío Viéitez arropan a los padres de Diana
La Parroquia de Santa María de Caná, en Pozuelo de Alarcón (Madrid), ha acogido este miércoles una misa funeral en recuerdo de Diana a la que han asistido representantes de la Guardia Civil y de los ayuntamientos de A Pobra do Caramiñal y Rianxo, además de los padres de otros niños y jóvenes asesinados.
Juan José Cortés, el padre de Mari Luz (la menor asesinada hace diez años en Huelva), no ha querido dejar sola a la familia de Diana en estos duros momentos. Él, mejor que nadie, sabe por lo que están pasando.
Hace ahora 10 años, el 13 de enero de 2008, la vida de los Cortés se vio truncada. La pequeña Mari Luz, de cinco años, salió a comprar chucherías y nunca volvió a casa. Su cadáver apareció 54 días después flotando en la ría onubense.
Para Podemos, condenar a prisión permanente revisable al asesino de una niña de cinco años sería ‘aplicar el principio de venganza’
El brutal asesinato fue cometido por el pederasta Santiago del Valle, que en el momento del suceso tendría que haber estado en prisión cumpliendo una condena por abusos sexuales a su propia hija.
El hecho de que la víctima sea menor de 16 años y se trate de una persona especialmente vulnerable habría significado una específica circunstancia agravante para que la prisión permanente revisable fuera impuesta.
Pero este supuesto no se producirá porque, para Podemos, imponer esta pena sería -en palabras del diputado Eduardo Santos– “aplicar el principio de venganza en lugar del de justicia, rompiendo con la tradición humanista del derecho penal”.
Desde ese momento, la vida de Juan José Cortés se centró en pedir justicia para su hija, no sólo llevando a la cárcel a los responsables de su muerte, sino también iniciando una lucha incansable por toda España con el objetivo de lograr una reforma del Código Penal que incluyera la figura de la prisión permanente revisable para que lo ocurrido con Mari Luz no se repitiera.
Para Compromís, lo brutal no es asesinar a una menor, sino aplicar la prisión permanente revisable
Pero se repitió. El 24 de enero de 2009 desaparecía Marta del Castillo. El padre de la joven sevillana, Antonio del Castillo, también ha asistido a la misa por Diana Quer. Él no ha podido dar el último adiós a su hija porque, nueve años después, su cuerpo aún no ha sido hallado. El asesino confeso, Miguel Carcaño, fue condenado a 20 años de cárcel por la Audiencia de Sevilla, pena que elevó el Tribunal Supremo hasta los 21 años y tres meses.
Carcaño lleva ocho años riéndose de la familia de Marta dando diferentes versiones de los hechos. En un primer momento relató a la Policía que mató a la menor de un golpe en la cabeza con un cenicero. Más adelante cambió su declaración y dijo que, tras abusar de ella, fue Javier Garcia, ‘El Cuco’, -también condenado por encubrimiento- quien la estranguló. Meses después ofreció de nuevo la primera versión. Luego volvió a cambiar y dijo que fue su hermano el que había acabado con la vida de la joven.
Pero, para Compromís, a juzgar por sus palabras, lo brutal sería aplicar la prisión permanente revisable. “Para el recluso significa una condena a pudrirse y no a resocializarse”, afirmó sin ningún tipo de tapujo Enric Bataller.
Hasta ahora, las Fuerzas de Seguridad han llevado a cabo ocho dispositivos de búsqueda del cuerpo de Marta, tras las múltiples versiones del asesino confeso. No obstante, Antonio del Castillo mantiene la esperanza de que se encuentre el cadáver y recientemente ha afirmado que esperará “no dos sino cuatro horas, volveré a llamar y llamar, seguiré buscando y, si algún día hay suerte, aparecerá”.
Para el PSOE, aplicar la prisión permanente a quien ha quitado la vida a un inocente supone ‘hacer un flaco favor a la libertad’
También al PSOE le deberán estar agradecidos los asesinos de Diana, Mari Luz, Marta y los pequeños Ruth y José. El diputado Juan Carlos Campo no tuvo reparos en señalar que con la prisión permanente “se hace un flaco favor a la libertad porque, además, niega la concepción resocializadora del sistema penitenciario”.
Ruth Ortiz, exesposa de José Bretón, condenado a 40 años de prisión por asesinar a sus hijos Ruth y José en 2011, tampoco ha faltado a la despedida de Diana. Su exmarido, conocido como «El monstruo de Las Quemadillas”, asesinó -según sentencia firme- a sus dos pequeños quemándolos en una hoguera a 1.200 grados de temperatura el 8 de octubre de hace siete años en su finca cordobesa.
“A mí no se me puede borrar la imagen de las tres horas que estuvo ese psicópata delante de la hoguera viendo arder los cuerpos y oliendo la carne quemada de sus propios hijos mientras se consumían. Primero los durmió con orfidales, luego los quemó hasta que los huesos se pulverizaron. He llevado muchos casos, pero ninguno tan atroz como este”. Estas duras palabras fueron pronunciadas por uno de los investigadores de la Comisaría General de Policía Judicial de Madrid que llevó muy de cerca este caso.
Para el PNV, la prisión permanente ‘no satisface las necesidades de la sociedad’
Sin embargo, para Mikel Legarda, diputado del PNV encargado de presentar en el Pleno la proposición de ley, la prisión permanente revisable “no satisface las necesidades de la sociedad, ni es idónea ni proporcional”.
La reforma por la que luchó el padre de Mari Luz se llevó a cabo finalmente en 2012, si bien la prisión permanente revisable se recogía únicamente para delitos de terrorismo, por lo que continuó peleando hasta que en 2015 logró su objetivo de que esta figura se extendiera a todos los delitos graves.
El parricida de Pontevedra, único condenado a prisión permanente revisable
En agosto de 2015, David Oubel asesinó a sus hijas de cuatro y nueve años, Candela y Amaia, con una sierra radial eléctrica y un cuchillo de cocina. Desde que el Congreso de los Diputados aprobara la prisión permanente revisable con los votos del PP, el parricida de Pontevedra ha sido el único preso en España condenado a esta pena.
Rocío Viéitez, la madre de las dos niñas, también ha compartido el profundo dolor por la pérdida de Diana y no ha querido faltar a la misa en su recuerdo. Ha sido precisamente ella quien ha puesto en marcha una campaña de recogida de firmas a través de Change.org para solicitar a los partidos políticos que no deroguen la que es la máxima pena privativa de libertad que existe en nuestro Código Penal.
La petición ha sido apoyada por la familia de Diana y, a 17 de enero, supera las 389.500 firmas. “Que la trágica muerte de mi hija contribuya, al menos, a hacer que nuestra sociedad sea un espacio de convivencia más justo y solidario en el que no tengan cabida los depredadores que atentan sin compasión alguna contra la vida de seres inocentes”, afirmó Juan Carlos Quer.
¿Qué es la prisión permanente revisable?
La prisión permanente revisable podrá ser impuesta únicamente en supuestos de excepcional gravedad -asesinatos especialmente graves y en los supuestos más graves de genocidio o de crímenes de lesa humanidad- en los que está justificada una respuesta extraordinaria mediante la imposición de una pena de prisión de duración indeterminada, si bien sujeta a un régimen de revisión.
Esta figura no renuncia a la reinserción del penado: una vez cumplida una parte mínima de la condena, un tribunal colegiado deberá valorar nuevamente las circunstancias del preso y del delito cometido y podrá revisar su situación personal.
Cumplida esa primera parte mínima de la pena y si el tribunal considera que no concurren los requisitos necesarios para que el penado pueda recuperar la libertad, se fijará un plazo para llevar a cabo una nueva revisión de su situación. Y si, por el contrario, el tribunal valora que cumple los requisitos necesarios para quedar en libertad, se establecerá un plazo de libertad condicional en el que se impondrán condiciones y medidas de control orientadas tanto a garantizar la seguridad de la sociedad como a asistir al penado en esta fase final de su reinserción social.
La pena de prisión permanente revisable no constituye, por tanto, una suerte de
“pena definitiva” en la que el Estado se desentiende del penado.
Los padres de inocentes asesinados exigen justicia
La madre de las pequeñas brutalmente asesinadas denuncia que “en este afán de ser correctos, de mente abierta, tolerantes y democráticos nos olvidamos de la parte que permanece, en la gran mayoría de los casos, callada: las víctimas”. “¿Acaso la ley debe proteger mejor y dar más amparo al delincuente que a la víctima? ¿La libertad de uno significa la pérdida de libertad del otro (víctima)?”, se pregunta.
Ruth Ortiz también se ha manifestado al respecto y ha señalado que “si la Constitución actualmente está encaminada para la reinserción, que reinserten a otro tipo de presos”. “José Bretón no se va a reinsertar, no se arrepiente y esa persona no pinta nada fuera de la cárcel”, ha repetido en diferentes ocasiones.
Juan José Cortés, al que muchos llaman “padre de la prisión permanente revisable”, considera “injusto” que haya partidos políticos que estén planteando la derogación de la prisión permanente revisable del Código Penal, algo por lo que luchó durante años.
El padre de la pequeña Mari Luz, asesinada cuando tenía cinco años, se ha dirigido a Pablo Iglesias, quien -asegura- “demuestra que no tiene ni idea de lo que se cuece, de lo que vivimos los ciudadanos españoles y las familias, se cree que está jugando a Juego de Tronos”.
“¿Qué adelanta derogando la prisión permanente revisable?”, se pregunta, a la vez que recuerda que “es un derecho que nos tiene que amparar a los padres que hemos perdido a hijos inocentes, no a criminales y asesinos”.
¿De verdad creen que la prisión permanente revisable ‘no satisface las necesidades de la sociedad’?
Podemos, PSOE, Compromís… ninguno de ellos ha arropado a la familia de Diana Quer en el último adiós a la joven asesinada con 18 años. De haberlo hecho, queda en el aire la duda de si se habrían atrevido a mirar a sus padres y a su hermana a los ojos.
Y es que, ¿de verdad creen que los ciudadanos desean la reducción del tiempo de condena de un individuo que ha matado cruelmente a una niña de cinco años? ¿De verdad creen que asesinos como ‘El Chicle’, que dejó el cadáver de Diana en un pozo lastrado con contrapesos para mantenerlo hundido, se merecen penas más benévolas?
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