El Partido Popular ha asumido la ley del aborto que recurrió ante el Tribunal Constitucional hace casi 13 años. Su líder, Alberto Núñez Feijóo, no ha dudado en mostrar su satisfacción por una ley de plazos que, a su juicio, es «correcta», está «bien construida» y merece todos sus «respetos».
Según Feijóo, es «bueno» que el TC, hoy dominado por una mayoría izquierdista y presidido por Cándido Conde-Pumpido, fiscal general del Estado en la etapa de Zapatero, «vaya marcando el camino de la constitucionalidad de las leyes». Este aplauso entusiasta del PP al aborto llega con los estatutos vigentes del partido defendiendo todavía el derecho a la vida. «Creemos en la persona como eje de nuestra acción política, social e institucional. Defendemos el derecho a la vida, a la dignidad, al pleno ejercicio de derechos y libertades en igualdad de condiciones entre hombres y mujeres«, recoge el artículo 2.
Mientras, son varios los diputados que firmaron este recurso que mantienen su escaño en la bancada popular en el Congreso. Es el caso de Cayetana Álvarez de Toledo, diputada por Barcelona; Carlos Aragonés, diputado por Madrid; Ana Belén Vázquez Blanco, diputada por Orense; Sandra Moneo Díez, diputada por Burgos y una de las que presentó junto al entonces diputado Federico Trillo el recurso ante el TC; Guillermo Mariscal Anaya, diputado por Las Palmas; Joaquín María García Díez, diputado por Lugo; Gabriel Elorriaga Pisarik, diputado por Madrid; José Ignacio Echániz Salgado, diputado por Guadalajara; Celso Luis Delgado Arce, diputado por Ourense; y José Antonio Bermúdez de Castro, diputado por Salamanca. También lo firmaron, entre otros, el expresidente del Gobierno Mariano Rajoy y la exvicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría, ambos fuera de la política, y la presidenta de la Asamblea de Madrid, María Eugenia Carballedo.
Dos firmantes del recurso defienden la vida como diputados de VOX
Lourdes Méndez Monasterio e Ignacio Gil Lázaro firmaron el recurso ante el TC en 2010 como diputados del PP… y hoy defienden el derecho a la vida como diputados de VOX, una formación que en su Agenda España se compromete a «salvaguardar jurídicamente el derecho a la vida desde la concepción hasta la muerte natural y acabar con la cultura de la muerte, comenzando por la derogación de la Ley de Eutanasia y de la Ley del aborto libre».
Méndez Monasterio es autora del libro «Del derecho a la vida al derecho al aborto, a la luz de los debates parlamentarios y de la Constitución Española (1812-2017), de Fundación Universitaria Española, y en la Cámara es portavoz de VOX en la Comisión de Derechos de la Infancia y Adolescencia; y Gil Lázaro es miembro de la Mesa del Congreso –vicepresidente cuarto– y vocal en la Comisión Constitucional.
«Nuestra mirada está en la defensa de la vida», defiende Lourdes Méndez, al tiempo que agrega que el objetivo de la nueva ley del aborto que el Senado dio luz verde esta semana –y que elimina el periodo de reflexión, y permite el aborto a las menores de 16 y 17 años sin permiso paterno y la elaboración de una lista negra de objetores de conciencia– es que, ante un embarazo imprevisto, sólo haya un camino: el aborto.
Tras la decisión del TC, ha manifestado que es «la primera consecuencia» del «asalto» que se ha producido al máximo intérprete de la Carta Magna y ha avisado de que la izquierda tiene muy claro que, para implantar su ideología, «el primer valor que hay que atacar es el de la vida». En este sentido, ha subrayado que el fallo contraviene la propia doctrina del Tribunal Constitucional, «que considera el valor de la vida como un bien supremo en nuestro sistema constitucional», y ha dicho que, con las declaraciones de Feijóo, «se ha ratificado y consumado la traición» del PP. «Al menos ha despejado cualquier tipo de duda que pudieran tener sus electores», ha subrayado, antes de afirmar que la defensa de la vida no es algo «circunstancial», sino «la piedra de toque de una civilización».
