La organización Save The Children ha lanzado una campaƱa que, con el tĆtulo āLos Ćŗltimos 100ā, muestra la historia de cien muchachos fenecidos – como resultado de acosos sexuales o escolares – en los Ćŗltimos cinco aƱos en EspaƱa.
Eclipsados por las agresiones contra mujeres, que se utilizan como inagotable arma ideológica, los casos de violencia contra los niños no gozan del eco mediÔtico que merecen. De esta manera, desde 2012 han fallecido mÔs de un centenar de niños como resultado de acosos sexuales o escolares; escalofriantes cifras que ponen de manifiesto la imperiosa necesidad promover un cambio social.
Para denunciar estos episodios ā cada vez mĆ”s frecuentes ā de violencia contra los niƱos, la organización Save The Children ha lanzado una campaƱa que, con el tĆtulo āLos Ćŗltimos 100ā, muestra la historia de cien muchachos fenecidos en los Ćŗltimos cinco aƱos y urge a emprender un proyecto legislativo que contribuya a mitigar esta lacra. Un proyecto legislativo que habrĆa de reunir el consenso de todos los partidos polĆticos.
El manifiesto con el que se ha presentado la iniciativa expresa la magnitud de este problema al que los polĆticos hacen oĆdos sordos: āSólo un 15% de los casos de violencia sexual contra los niƱos se denuncia, uno de cada dos abusos sexuales en EspaƱa son contra menores, uno de cada diez estudiantes afirma ser vĆctima de acoso escolar y seis de cada diez reconocen haber recibido insultos o golpesā.
En este sentido, los organizadores de la campaƱa han denunciado el silencio social y mediĆ”tico que envuelve a esta ominosa realidad: āQueremos visibilizar una realidad que es invisible, porque no interesa a los polĆticos, porque ocurre dentro de los hogares o centros escolares y ahĆ se queda; son pocos los casos que se denuncian y no existen los medios suficientes para hacerlo posibleā, ha aseverado la directora de la comunicación, Laura PĆ©rez.
Asimismo, la directora de sensibilización, Ana Sastre, ha destacado durante la presentación de la iniciativa que en estas situaciones āse imponen el silencio y el miedo, y la amenaza hace que los niƱos no sepan dónde ir a buscar ayudaā.
Consenso para paliar esta violencia
Como ya se ha seƱalado, esta campaƱa pretende impeler un movimiento social que exija el cumplimiento del acuerdo alcanzado en el Parlamento, por consenso de todos los grupos polĆticos, para pedir al Gobierno que proponga una ley encaminada a erradicar la violencia contra la infancia. Una ley que, si respetara las demandas de los partidos de la oposición, el Ejecutivo deberĆa empezar a tramitarse en septiembre.
De acuerdo con Save the Children, tres son las medidas que deberĆa recoger esa hipotĆ©tica ley: protocolos obligatorios en los colegios para detectar y actuar frente al acoso escolar; campaƱas de sensibilización ante cualquier tipo de violencia contra los niƱos; y que la prescripción por delitos de abusos sexuales comience a contar cuando la vĆctima cumpla treinta aƱos (ahora empieza a contar a los 18).
En cualquier caso, los organizadores de la campaƱa han abundado en la idea de que, cuanto mĆ”s se demore la bĆŗsqueda de soluciones para esta luctuosa cuestión, mĆ”s niƱos padecerĆ”n en sus carnes la violencia.āNo conocemos la dimensión de esta violencia y corremos el riesgo de llegar demasiado tarde, como pasó con los cien protagonistas de esta campaƱaā, ha seƱalado la ya citada Ana Sastre, quien ha reclamado tambiĆ©n āvoluntad polĆtica para hacer estadĆsticas y calcular los recursos necesarios para detener esa violenciaā.
Con afĆ”n de ilustrar mejor la acuciante necesidad de abordar este problema, cabe mentar las cifras ofrecidas por el Registro Unificado de Maltrato Infantil, entidad incardinada en el Ministerio de Sanidad. AsĆ, segĆŗn Ć©ste, mĆ”s de 13.000 menores sufren malos tratos por parte de algĆŗn familiar y en 2016 se interpusieron 4.650 denuncias por este motivo.