El régimen de Nicaragua ha ordenado el cierre de otras 96 ONG locales, incluida la Fundación Centro de Estudios Internacionales (CEI) que dirigió Zoilamérica Ortega Murillo -hijastra del dictador del país, Daniel Ortega, a quien denunció en 1998 por abusos sexuales-.
Asimismo, el régimen ha argumentado que esas ONG han incumplido por no inscribirse “en el registro de Agentes Extranjeros«.
Así, con el cierre de estas 96 asociaciones, se elevan a 179 las Organizaciones No Gubernamentales (ONG) disueltas en los últimos tres días, incluida la Academia Nicaragüense de la Lengua.
En Nicaragua, con el voto de los diputados sandinistas y sus aliados, que son mayoría en el Parlamento, se ha cancelado la personalidad jurídica al menos a 344 ONG desde diciembre de 2018, ocho meses después de que estallara una revuelta popular por unas controvertidas reformas a la seguridad social calificada como un intento de golpe de Estado por Ortega.
Del mismo modo, el diputado sandinista Filiberto Rodríguez, promotor de las iniciativas, ha sostenido que las ONG afectadas utilizaron recursos de las donaciones que recibían para intentar derrocar a Ortega, aunque no ha presentado pruebas.
Nicaragua atraviesa una crisis política y social desde abril de 2018, que se ha acentuado tras la farsa electoral del pasado 7 de noviembre, en las que Ortega fue reelegido para un quinto mandato, cuarto consecutivo y segundo junto con su esposa, Murillo, como vicepresidenta, con sus principales contendientes en prisión.
