Noto mucho solivianto por la información que confirma lo que todos sabíamos: que el Gobierno de España colabora estrechamente con los terroristas de ETA que cumplen condena en sus cárceles para liberarlos cuanto antes. Y que para ello coordina sus acciones tanto con los propios asesinos como con la representación política de ETA que hoy se llama Bildu. El Gobierno de Sánchez apenas actúa con disimulo y ya ha trasladado a unos cien asesinos al País Vasco para, en complicidad con el Gobierno vasco, hacerlos estar pronto libres en sus casas.
Este Gobierno ya había dejado en libertad a todos los golpistas catalanes condenados, llámenlo como lo llamen, un golpe y acto de traición y rebelión que podía haber desatado un baño de sangre. De la misma forma está dejando en libertad a todos los asesinos del terrorismo vasco que bastante sangre derramaron. Como ven, el Gobierno de Pedro Sánchez no ha tenido ningún reparo en alinearse con todas las opciones del crimen político que han sido juzgadas y condenadas por la Justicia en España. Esto condiciona toda la vida política española y pone aún en mayor peligro la mermada seguridad jurídica y la muy degradada funcionalidad de la democracia española.
El Gobierno de Sánchez es el anfitrión obsequioso en una España que se ha convertido en santuario y retaguardia de ese movimiento comunista del crimen organizado
Pero las conexiones criminales de este Gobierno van mucho más allá. Y hay que ser muy conscientes de ellas para entender los peligros que se ciernen sobre España aparte de la quiebra económica, de la inmigración ilegal, la violencia y la destrucción del tejido social y empresarial. Es vital para la capacidad de autodefensa que logre movilizarse en la sociedad española tras más de ocho lustros de adormecimiento, estafa continuada, engaño y autoengaño bajo el consenso bipartidista y autonómico.
Porque se han multiplicado en tres años las pruebas de que el Gobierno español se ha convertido en uno de los pilares de la internacional antidemocrática y socialcomunista del Foro de Sao Paulo y del Grupo de Puebla. Esta organización multinacional coordina a gobiernos, partidos, organizaciones estatales, paraestatales y privadas, empresas legales e ilegales, bandas y cárteles del crimen organizado y tráfico de drogas, caudillos indigenistas y redes de medios de comunicación, agitación y propaganda. Su centro neurálgico está en La Habana y su financiación que, a principios del siglo corría a cargos de Hugo Chávez y la industria petrolera, hoy está en la colosal industria del narcotráfico en cuya ejecución, gestión y blanqueo de dinero participan de una forma u otra los miembros.
El Gobierno de Sánchez es el anfitrión obsequioso en una España que se ha convertido en santuario y retaguardia de ese movimiento comunista del crimen organizado. Pero también en plataforma política donde se hace la campaña electoral para los comunistas candidatos para destruir las democracias en esta fase avanzada del asalto sobre Iberoamérica, se llame Boric, Petro o Lula. En España, los medios sicarios, comprados y entregados al Gobierno celebran y promocionan a los líderes políticos que quieren cubanizar sus países y ocultan los abusos y la presencia de las redes de corrupción socialcomunista a las que están conectados también sus amos. En España, reposan los caudillos, hacen vida de multimillonarios los hijos y nietos, y se invierte, divierte y convierte el botín de los saqueos al erario, de las colosales operaciones cambiarias y del narcotráfico.
España es la dirección de lujo y depósitos del botín de los peores ladrones y saqueadores del patrimonio nacional de Venezuela
Protagonistas en esta financiación de lo que es la toma comunista de toda América central y del Sur y de su cabeza de puente europea que es España son muchos. En una coordinación que muchas veces parece tener la fluidez de una multinacional norteamericana. Ahí están las FARC, cuyo representante en las negociaciones de La Habana es hoy miembro del Gobierno español como secretario de Estado de la Agenda 2030, el ejército y el régimen de Maduro, los cárteles mexicanos aliados con el partido del presidente López Obrador, los amigos de Podemos García Linera, Evo Morales, Rafael Correa, Cristina Fernández de Kirchner, Piedad Córdoba o Gustavo Petro, otros conocidos y anónimos y una inmensa red de colaboradores ya sean ideológicos o solo por afán lucrativo. Ahí está Hezbolá como brazo narco e ideológico de Irán, ahí están Rusia y China, ayudando en lo que les interesa para desestabilizar todo Occidente. Y ahí está Zapatero, el asistente principal del mayor asesino de América, Nicolás Maduro. Ahí están, por supuesto, los comunistas españoles de Podemos que son la más eficaz operación de franquicia del narcocomunismo iberoamericano, lanzada en su día por Chávez. Que logró que la corrupción del PSOE en Iberoamérica, en principio meramente lucrativa para sus dirigentes, se convirtiera en complicidad criminal en sus proyectos ideológicos y en su plan de hacer de España la cabeza de puente de sus intereses que ya es. A eso colaboran voluntaria o involuntariamente todos los socialistas españoles que tantas veces integran para estas causas a los socialistas europeos. Con la abierta colaboración del Alto Representante de la UE, Josep Borrell, cuyas simpatías para los regímenes corruptos y criminales del socialismo iberoamericano son tan intensas que debemos ser muy pocos los que podemos creer que sean desinteresadas.
Todo comenzó con el 11-M y la llegada al poder de José Luis Rodríguez Zapatero cabalgando el humo de las bombas y la agitación en las calles en gran parte dirigida por activistas que hoy sabemos recibieron entrenamiento y remuneración en Venezuela, Cuba y otros países americanos. Poco después. Llegó Hugo Chávez a España, escoltado por Monedero, en la primera visita de Estado que recibía Zapatero desde su trágica y sangrienta llegada al poder. Casi 20 años después, España es la dirección de lujo y depósitos del botín de los peores ladrones y saqueadores del patrimonio nacional de Venezuela y muchos otros países americanos. Los delincuentes que se han beneficiado de los veinte años del sistema del cambio, de las concesiones, del saqueo de PDVSA y de tantos robos. Por Serrano y Lista se pasean las mujeres, las hijas y las putitas de los grandes traficantes de toda Iberoamérica, como bien sabe la DEA. Y en las compras de los pisos más caros, de edificios enteros y hasta manzanas se mezclan dineros mexicanos, venezolanos, peruanos, argentino o bolivianos de toda índole, dinero viejo y nuevo, dinero legal e ilegal y de todos los colores, uno de ellos el de la sangre.
Dinero de fortunas de generaciones de negocios más o menos honrados que han perdido la esperanza de que el subcontinente tenga un mínimo futuro. Y dinero saqueado con velocidad en los pasados años o lustros gracias al poder político. Por ahí se pasean todos sin ninguna dificultad de residencia ni movilidad, no como los iberoamericanos de a pie. Hispanoamericanos maravillosamente formados y educados sobreviven en España en trabajos de esfuerzo físico. Mientras, rufianes gritan en las terrazas los precios de los cientos de euros que vale la botella que se están bebiendo y que gastan, y visten tan caro que se sabe que jamás lo ganaron. Por allí están paseando los favores de sus amigos del Gobierno de España. Situación que simboliza bien el esperpento del caso de Hugo Carvajal. Tuvo que mandar la DEA a España a su gente para señalar la casa y el portal donde habían escondido al que fuera jefe de los servicios de información de Chávez, gran traficante y gran operador en todos los escenarios criminales entre España y América. Pero en un país donde la Fiscalía General del Estado está en manos de la mujer del principal abogado y representante de los mayores y peores criminales de América, todos tienden a sentirse seguros. Más aún cuando los grandes jefes en La Habana o Caracas saben lo que saben de la vida y milagros de la mayoría de los personajes que integran la banda dirigente del poder socialcomunista. Ellos sí saben cuántas veces llegan a Madrid como a Moscú, Estambul o Teherán cargamentos de maletas como aquellas de las que por un accidente y una concatenación de torpezas tuvimos noticia los españoles que había traído Delcy Rodríguez. Aquellas entraron en España y desaparecieron gracias a una intervención de Ábalos, hoy exministro pero siempre muy amigo de Cuba y del ELN, esa segunda banda narcoterrorista junto a las FARC. Nosotros no sabemos ni qué pasó con las maletas ni cuál era su contenido. Sí sabemos que en este caso como en tantos otros han desaparecido las pruebas que podían haber aclarado algo. Y quizás entenderíamos mejor esa entrega de millones por el Gobierno español a la compañía Plus Ultra que ahora es la compañía de Maduro.
El Foro Madrid y la Fundación Disenso están volcados en expandir la lucha de liberación y de reconquista de libertades y derechos por toda Iberoamérica
En España, la sociedad ha aceptado sin apenas protesta que todo sea ya secreto de Estado bajo Sánchez, hasta el salario de su mujer en un trabajo inventado. La rendición de cuentas ha desaparecido. La impunidad de los abusos y sinfín de delitos, que se intuyen o ven claramente pero no se investigan ni denuncian por resignación o miedo, revela que España es ya uno más de los países controlados por esa mafia socialcomunista internacional.
Todos debemos ser conscientes en España de que, según aumenten las dificultades para imponer su voluntad, las fuerzas socialcomunistas pasarán de unos delitos a otros de mayor coacción y violencia contra la población que resista o se oponga. Y que nadie piense en España que la Unión Europea le va a librar del deterioro de las libertades y de que socialistas y comunistas del Foro de Sao Paulo se comporten como socialistas y comunistas se comportan desde el poder en países donde el crimen de Estado es la política cotidiana.
Combatir a este flagelo aquí en España debiera ser asumido como un deber patriótico por todo español honrado. VOX está entregado a esta tarea. Y el Foro Madrid y la Fundación Disenso están volcados en expandir la lucha de liberación y de reconquista de libertades y derechos por toda Iberoamérica. Es la más honrosa tarea que tenemos todos los iberoamericanos para recuperar esta inmensa joya de la civilización occidental que es la Iberosfera, hoy secuestrada y torturada por sus enemigos.
